Crónica de VOLBEAT + ICED EARTH (La Riviera, Madrid) – 23/10/2013
CUANDO EL PEZ PEQUEÑO SE COME AL PEZ GRANDE
Sabor agridulce el que viene a mis papilas gustativas al recordar el concierto de VOLBEAT + ICED EARTH, aunque fue dulce, muy dulce, mi reencuentro con los veteranos ICED EARTH y su impecable puesta en escena. A pesar de que la banda de Schaffer nunca estuvo entre mis favoritas, debo reconocer que siempre fueron de mi agrado, especialmente durante los años con Matt Barlow, por lo que fui de las que lamentaron la marcha del pelirrojo vocalista -las dos veces-. Sin embargo, y para mi grata sorpresa, Shaffer sigue teniendo las ideas muy claras y sabe cómo rodearse de los mejores, lo cual quedó demostrado no sólo con “Dystopia” (2011), último álbum de la banda y primero con Stu Block a las voces, sino también en sus actuaciones con la nueva formación. Se trata de un combo sólido y técnicamente correctísimo, consiguiendo transmitir a la vez una fuerza devastadora. Stu es un vocalista de sobresaliente, preciso en graves y agudos, con una potencia atroz y un registro que quita el hipo. Se adapta a la perfección al estilo de la banda y, por si esto no fuera suficiente, su soltura en el escenario hace de él el perfecto frontman. Los coros a cargo de Freddie Vidales, otro punto extra. 45 minutos de adrenalina de la mejor calidad. Vuelven a principios de 2014, yo ya lo tengo apuntado como cita obligada.
VOLBEAT+ICEAD EARTH (La Riviera, Madrid, 23 oct.2013) on PhotoPeach
Amargo, sin embargo, el regustillo que se me quedó con VOLBEAT. Los daneses me fascinaron desde la primera vez que los escuché, y aunque su último trabajo, “Outlaw Gentlemen & Shady Ladies” (2013), me dejó un poco indiferente, es de esas bandas que están en mi lista de “canciones para el buen rollo”, o dicho de otra manera, perfectas para animar a los muertos. Mis expectativas eran altas, por lo que mi desilusión también fue notable. Pero no me malinterpretéis, musicalmente dieron la talla más que de sobra. Los problemas, a mi parecer, fueron básicamente dos: en primer lugar, el sonido de los altavoces no les hizo justicia en absoluto. Una espantosa bola de graves se comía todas las guitarras y el estruendo era realmente molesto. En segundo lugar, la puesta en escena me pareció bastante aburrida. El caso es curioso, pues parecían entregados a su público y a la vez denotaban un cansancio oculto pero perceptible. Con todo, una servidora apenas sentía un atisbo de ganas de saltar y airear la melena –como pensé que ocurriría-. Hora y media de show sin pena ni gloria, sin ser un fracaso, pero tampoco un éxito. Eso sí, su nuevo fichaje a las seis cuerdas, el ex ANTHRAX Rob Caggiano, muy acertado.
¡Ah!, casi se me olvida. VOLBEAT consiguieron sacarme una medio sonrisa en el momento menos esperado. La banda interpretó un jocoso popurrí de temas archiconocidos –SABBATH, MAIDEN, JUDAS, Elvis…- que en un principio me resultó insípido pero que finalmente me hizo soltar la carcajada con una más que conseguida imitación de Lemmy Kilmister por parte del cada vez más delgado Poulsen. A favor de todos cabe destacar la patente buena relación entre las dos bandas, saliendo Michael Poulsen a tocar con Schaffer durante la última canción de ICED EARTH, y permaneciendo estos últimos entre bambalinas atentos a la actuación de VOLBEAT hasta su último acorde.
Me fui a casa algo decepcionada con los daneses, pero sospecho que les daré una segunda oportunidad, que algo me dice que no fue su mejor noche. ICED EARTH, sin embargo, demostraron por qué llevan en el ruedo más de veinte años.
Texto: M. Jones
Fotos –IVN-