Concierto de HAMMERFALL+KROKUS+THE POODLES (Sala Joy Slava, Madrid 9 de Febrero)

Ya tenía ganas de ver un concierto en esta famosa discoteca de Madrid (donde se grababan en su momento los vídeos y actuaciones en directo del mítico programa “Aplauso”) de la que tan bien me habían hablado a hora de ver conciertos (la disposición es a modo de teatro, con dos pisos a su vez, con perfecta acústica y visión desde prácticamente cualquier punto de la sala… eso sí, demasiado grande no es pero para conciertos de mediano aforo, como en este caso, es perfecta).

Bueno, y centrándonos en lo que vimos esa noche, decir que la mezcla era muy interesante, desde el punto más hardroquero y sleazy incluso (sobre todo a nivel de pintas) de los germanos THE POODLES, el rollo roquero de vieja escuela 100% clásico de los suizos KROKUS (¡qué buena banda, coño!) y el punto heavy/power de los suecos HAMMERFALL).

De la actuación de THE POODLES no podemos decir demasiado porque llegamos justo cuando comenzaban su último tema, un pegadizo “Night of pasión” que me gustó mucho, aunque me pareció que el cantante (al que le doy un 10 en pintas y actitud, muy en onda Sebastián Bach y Vince Neil)) anda muy limitado de voz. A pesar de todo (y por lo que comentamos con amigos que llegaron antes), buen concierto de hard/heavy, aunque quizás prevaleciendo por momentos imagen y actitud sobre música en sí (lo cual, en cierto modo, tampoco tiene que considerarse un detalle negativo).

Con KROKUS la sala ya estaba hasta arriba y es que, de hecho, había bastante gente que había ido al concierto casi a ver sólo a los míticos suizos liderados por un gran Marc Storace, un vocalista y frontman a la vieja usanza que se comió en sólo 50 minutos a los 4 POODLES y a los 5 HAMMERFALL. La verdad es que la banda dio un concierto de libro, encantando a sus fans y, lo más importante, enganchando (y de qué manera) a un público más joven que, me juego el cuello, en un 80% al menos, no habían ni siquiera oído hablar de KROKUS en su vida… pero a los 15 minutos de concierto toda la sala estaba dando palmas, coreando estribillos y “bailoteando” al buenísimo ritmo de los temas roqueros y metaleros de los alumnos heavies más aventajados de AC/DC. Concretamente me encantó la actitud entusiasta del bajista Tony Castell, la clase y punto clásico de los guitarristas Mandy Maier y Dominique Favel, la fuerza del trotamundos Stefan Schwarzmann (ex batería, entre otros, de ACCEPT, HELLOWEEN, RUNNING WILD…) y el dominio de escenario, actitud, elegancia y buen rollo roquero de un excelente vocalista y frontman como Marc Storace. Además, el set list tuvo de todo, desde temazos clásicos como “Rock city”, “Bad boys rag dolls” o “Rock n´roll in the night” (con la que cerraron) hasta un par de buenas píldoras de su genial último disco como fueron la propia “Hellraiser” y una pegadiza y más relajada “Angel of my dreams”.

En definitiva, concierto de10 pero lógicamente muy escaso para los que, esta vez, teníamos más ganas de ver a los teloneros que a los propios cabezas de cartel. Lo cierto es que gustaron muchísimo (ya digo que tanto a sus fans como a quienes no les conocían de antemano) y creo que se ganaron el derecho a volver como cabezas de cartel, punto que, después de 30 años de historia, honestamente merecían por encima de HAMMERFALL pero… es lo que hay que se suele decir… Señores organizadores de festivales… ¡KROKUS!

En cuanto al concierto de HAMMERFALL, bien es cierto que eran los cabezas de cartel y que en directo nunca decepcionan, pero esta vez quizás fue la que peor les vi (y eso que era mi cuarta o quinta vez ya). Creo que con sus dos últimos discos han bajado un peldaño de calidad que a su vez se refleja en directo (de hecho, son de los que menos canciones tocan y esto es cuanto menos curioso). Otra cosa es que el concierto fuera divertido, muy heavy, “mueve melenas” y de puño en alto constante pero ya digo que no les noté tan sueltos como en otras ocasiones. Por cierto, comentar que a nivel escénico esta vez en Madrid (porque en Bergara al menos sí llevaba algo más de escenario, algo muy habitual e importante en los shows de HAMMERFALL) la cosa estuvo muy sosa aunque bien es cierto que el espectacular anillo de luces de la propia sala hizo el efecto al 100% de escenografía del grupo.

Eso sí, no me malinterpretéis, el concierto fue muy entretenido y heavy, la gente se lo pasó en grande y ellos se entregaron al 100% (aunque por ejemplo esta vez Joacim estuvo más flojo que nunca, incluso se olvidó 3 veces de la letra de “Rebel inside”) pero ya digo que quizás estén comenzando una cierta cuesta abajo y se notó. Yo de todas formas ya había disfrutado a tope de KROKUS y me tomé el concierto de HAMMERFALL como puro divertimento y así lo disfruté, coreando estribillos, bailando y moviendo los pelos como cuando era un “jovenzuelo truemetalero”, jeje.

A nivel de temas me encantaron los clásicos como “Templars of steel”, “Legacy of kings”, “A legend reborn”, “Riders of the storm” o el temazo “Renegade” (con el que comenzaron el primer bis después del cutre sólo de guitarra de Oskar… metiendo entre otras cosas partes del “Exciter” de JUDAS y del “Fury of the wild” de su disco anterior). Tras esto, una muy cañera “Heading the call”, el clásico “Hammerfall” (que sigue sin entrarme) y la coreadísima “Hearts on fire” para cerrar pusieron punto final a un concierto simplemente entretenido.

Sólo una reflexión personal: me encanta su actitud, la manera de presentar los temas, moverse y demás, pero creo que los “espectáculos” que montan alrededor de los sólos aburren al más pintado (y sinceramente creo que Anders Johansson puede hacer mucho más que las “tontunas” que se le ocurren en su sólo)… aunque ya digo que los dos últimos discos no les han convencido ni a ellos mismos por mucho que digan lo contrario (a los hechos me remito) y cómo no se pongan las pilas me temo que va a ser la siguiente banda grande en dar un paso atrás.

En definitiva, buenos THE POODLES, excelentes KROKUS y sólo entretenidos esta vez HAMMERFALL. (David Esquitino) (Fotos de Diego L. Pérez, publicadas en Rafabasa.com)