CROWN THE LOST: “Blind loyal faith” (Cruz del Sur):

Curiosa propuesta la del segundo disco de estos jóvenes de Pennsylvania (Estados Unidos), en una mezcla bastante curiosa que no te deja indiferente. Digamos que su propuesta base es un heavy metal bastante cañero, personalizado por una particular voz melancólica e intencionada de un Chris Renaldi que le da un punto diferente al conjunto. De todos modos, aquí hay thrash, hay power (americano y europeo) e incluso “melodeath” escandinavo, con influencias que pasan desde lo más clásico de gente como MAIDEN, KING DIAMOND, CANDLEMASS o METALLICA, pasando por propuestas más acordes con el “sonido Gotheburg” o incluso de gente como los alemanes SUIDAKRA (de los que, por cierto, tomaron el nombre gracias a uno de sus temas), con batería más cruda y acelerada, y una voz apagada pero con intención y personalidad que te llama la atención en todo momento por contraste.

Pese a su juventud, no les falta calidad ni buen hacer, además de tablas, incluso contando con una producción notable (con la única irregularidad de que la batería aparece quizás algo escondida), y hay que destacar sin duda las guitarras de Joe Bonaddio y David E. Gehke (duras, poderosas y melódicas a un tiempo) como la base de un disco que me ha sorprendido para bien, y eso que la portada (atractiva pese a todo) te invita a pensar más un disco gótico que en el interesante trabajo que hay detrás. También hay “peros”, y es que los temas son bastante similares entre sí y quizás algo largos, pero de todos modos canciones como “Defame the hypocrites” (muy guapa), “Bound to wrath”, la fantástica (y más melódica) “Finality” o la tralla rotunda y punto más heavy (incluso en la voz) de la propia “Blind faith loyalty”, que cierra el trabajo, te invitan a darles más que un voto de confianza a estos norteamericanos. La verdad es que un placer saber que en la tierra del Tío Sam aún hay bandas con ganas de innovar, sorprender y sobre todo hacer heavy metal (que no metal) con clase, personalidad e intención. Posiblemente no hagan historia pero al menos se llevan el gustazo y reconocimiento de saber que están bastante por encima de la media de nuevas bandas de nuevo cuño que han aparecido en los últimos años por allende los mares. (David Esquitino)